Vuelo, nado, siento pero ya no quiero detenerme por no encontrar tus ojos. Mi nave está entera, busca anclar en un puerto llamado reciprocidad... sigo viaje, no me detengo y reafirmo que el amor es una lotería y está librado tan al azar como lo que sentimos por alguien sin explicación alguna.
Anclado eternamente en mi corazón se encuentra este sentimiento que te pertenece. No se escapa, ya no se ahoga, salió a flote cuando te lo hice conocer: te pertenece.
Sigo viaje... mar adentro... mar abierto...
Anclado eternamente en mi corazón se encuentra este sentimiento que te pertenece. No se escapa, ya no se ahoga, salió a flote cuando te lo hice conocer: te pertenece.
Sigo viaje... mar adentro... mar abierto...